La práctica del distanciamiento social quedándonos en casa tanto como sea posible y mantener una distancia de 1 a 2 metros de los demás cuando tengamos que salir parece la medida más eficaz de prevención de la infección por SARS-CoV-2. También hay que evitar el contacto cercano con personas enfermas.
Las recomendaciones generales para reducir la transmisión de la infección son:
Lavado de manos con agua y jabón o con solución hidroalcohólica si no tenemos disponible el acceso al jabón.
Cubrirse la boca con el codo en caso de tos o estornudos.
Evitar tocarse la cara.
Limpieza y desinfección de objetos y superficies que se tocan con frecuencia.
El uso de mascarilla en personas sin sintomatología ya lo tratamos en una entrada anterior y sigue siendo controvertido y las recomendaciones varían según el país.
Aquí os dejo algunas infografías y vídeos interesantes sobre este tema.







